Una palabra, una sonrisa bastan.

Quise llamarte, pero me contuve. Iba por la A, la B, la C y así hasta llegar a tu nombre pero en ese momento decía: "que tontería, ¿para qué?", o quizás un toc-toc y me daba miedo tu respuesta. Supongo que atenderías y hablaríamos de mil cosas sin sentido, pero... ¿luego qué? Eso fue lo que me detuvo: "¿luego qué?". Entonces llegué a mi casa, volví a agarrar el teléfono e hice lo mismo otra vez, me puse esta canción que me recuerda a ti y traté de escribir lo que siento, pero no es sencillo... no es sencillo cuando tienes ideas arremolinadas en la cabeza que no saben salir. Quizás hubiera sido mejor quedarme callada, alejando el teléfono para no cometer una tontería, para no llamarte o repetir el itinerario de la A, la B y la C...y así, hasta llegar a tu nombre.

Pablo Neruda.

                                                                                                                                       
Y ¿luego qué?, me he preguntado muchas veces eso, seguimos viviendo con la certeza de que todo llegara a su fin, de que todo en la vida tiene un final, feliz o no, pero lo tiene. No siempre es así, la vida no siempre nos da la oportunidad de escribir un desenlace y la historia se queda a mitad de camino, sin poder terminar, quedando la duda de que hubiera pasado  si las cosas no hubieran sido así, viviendo con rabia por no haber intentado nada, con la nostalgia de que quizás pudiéramos haber echo algo para que todo fuera mas llevadero... Y ahora, aquí estamos, sin saber lo que puede ocurrir el día de mañana, sin hacer nada sabiendo que ahí vidas que se nos escapan de las manos, poco a poco, sabiendo tambien que el día de mañana nos arrepentiremos de esta situación y de no haber luchado. A lo mejor ya es tarde, pero si todavía ves el vaso medio lleno no des todo por perdido y aprovecha el tiempo, no dejes que la idea de que fuiste un cobarde te atormente dentro de unos años.
Sabemos de sobra que toda vida tiene un final, pero mientras tanto vive el camino que te lleva a la meta con las personas que quieres, deja a un lado las tonterías, no hagas de un grano de arena una playa, intenta no dejarte llevar por idea que tu mismo te has creado, ideas que no tienen nada de semejanza con la propia realidad que solo te llevan a problemas con los demás por tu propia cabezonería...
Solo tenemos esta vida para llevar a cabo todos nuestros pensamientos y sentimientos, por eso aprovéchala y no la malgastes. Vive rodeado de las personas que de verdad te quieren, las que te demuestran cada día su cariño, aunque sea una sonrisa, no ahí nada mas bonito que una mirada o una sonrisa de esas personas.
Dale una oportunidad al amor y si falla, dale otra, ahí veces que el mayor error que se puede cometer es tirar la toalla. No te avergüences de nada, si tienes que llorar delante de miles de personas, hazlo, si tienes que reír, hazlo tambien.
Tu forma de vivir la eliges tú, solo la vida es complicada si tu la haces así, por eso lo más fácil es dejarse llevar por uno mismo y por lo que lleva adentro.